CINE: Interstellar

Increíble, pero cierto. La primera vez que voy  a ver la misma película al cine dos veces. Ha sido el caso de esta  obra maestra.

No os podéis ni imaginar la de ganas, la de tiempo que llevo esperando para que se estrene esta película. Christopher Nolan volvía después de El Caballero Oscuro: la leyenda renace, y era la primera vez que iba a ver una obra suya en el cine siendo mi director favorito, o eso creo. No recuerdo si cuando fui a ver la última de Batman ya estaba obsesionada con Inception o El truco final, que creo que sí, pero ahora he vivido la experiencia con más mentalidad en la situación y viendo una película original de Nolan, viviendo su estreno, en la gran pantalla, toda la publicidad. He podido vivir esta película desde su comienzo y habiendo admirado ya todo el trabajo de Nolan.

Bien, después de decir todo esto y de haberlo sentido antes de entrar por primera vez a ver Interstellar, no me podía ni imaginar salir tan mal del cine... Y no por su final, sino porque la película me dejó llena de preguntas y con temas que desconocía, que me sacaban de mi realidad y que por más que quisiera, no podía encontrarles respuestas. Con toda mi admiración e ilusión, salir así del cine me estaba reventando la cabeza.

Esto puede contener spoilers.

El principio de la película, toda la historia con su familia, con su hija, perfecto. No hay nada que no se pueda entender de ahí, pero una vez que Cooper abandona la Tierra, que se adentra al espacio empieza lo bueno. Cosas que no entiendo, cosas que no llegaba a comprender a pesar de que había prestado atención para que no se me escapara mínimo detalle, ya conocemos a los Nolans. Pero fue imposible. Solo entendí el 30% de la película, sino menos...

La parte de la quinta dimensión o el agujero negro, esa parte fue la que me descolocó y la que hizo que mi cabeza buscara respuestas que no encontraba.

Así es que, con mi gran obsesión, sabía que iba a necesitar verla unas cuantas veces más (calculaba siete) para poder entenderla completamente y ver la obra de arte que sabía que era, pero que no llegaba a comprender. Y que mejor que hacerlo que en el cine.

Pues aquí estoy, recién salida de verla por segunda vez. Es la primera vez que hago esto y sinceramente, una película de Nolan la vería una, dos, tres o cuatro veces en el cine.

No os podéis ni imaginar la diferencia a una y a otra vez. Llorando en los mismos momentos, asustándome en las mismas partes, poniéndome en tensión en las mismas escenas, pero entendiendo y siguiendo la historia. He hay la gran diferencia.

Creo que no me quedan dudas, que he podido disfrutar la película como me hubiera gustado hacerlo la primera vez. He podido disfrutar y admirar a los Nolans como me esperaba.

Grandes momentos, una fotografía preciosa, un reparto inigualable y lo mejor de todo, la banda sonora que me hacia emocionar en todos los momentos,

Resaltar varias escenas, como la parte en la que las naves se están acoplando mientras giran (una gran escena de tensión), el momento en el que persiguen al artilugio volador por los campos de maíz, en la que les acompaña la banda sonora y es inevitable que se te pongan los pelos de punta, el momento en el que Cooper abandona la casa, etc. Y, que no se me olvide, esos momentos de silencio absoluto en el espacio. 

Sin más, gracias Nolan por pensar como piensas, y por supuesto, al otro Nolan, Jonathan, gracias.

Parece que se me olvidó, que para entender Inception (película que adoro) la tuve que ver 5 veces, y es la última vez que dudo de Christopher Nolan.

Una ciencia ficción pura que engancha, que llama la atención, el interés. Un buen trabajo realizado, una gran obra maestra en el cine.